sábado, 14 de octubre de 2017

LA BIBLIOTECA DE MI CENTRO - DIARIO DE APRENDIZAJE (5)

                                    Books in Black Wooden Book Shelf

Como ya os dije en anteriores entradas, mi centro es una Escuela Oficial de Idiomas ubicada en un pueblo de aproximadamente 11.000 habitantes, por lo que el trato con el alumnado, o en este caso, usuarios de biblioteca, es muy cercano. Por ello descartamos hace un curso académico el uso de carnets y simplemente comprobamos que el usuario está matriculado en nuestros cursos mediante identificación por el documento de identidad.
Cada profesor tiene una hora semanal de cargo de biblioteca, a excepción del coordinador que hace muchas más horas y a cambio se le reduce un grupo de clase directa. Cada profesor se responsabiliza de las tareas asignadas por el coordinador, también se ocupa del servicio de préstamo e información durante su hora de cargo semanal. La comunicación entre profesorado es un poco arbitraria, dependerá de cómo lo quiera hacer el coordinador, bien creando una carpeta con archivos en formato Word en el propio ordenador de la biblioteca, donde se apuntarán incidencias o cualquier otra cosa que deseemos comunicar; o bien, mediante post-its, que puede parecer a priori práctica chapucera, pero que nos resulta efectiva.
Se empezó utilizando AbiesWeb como sistema de catalogación pero resultó bastante confuso a la hora de volcar datos directamente, de alumnos matriculados a usuarios de biblioteca. Según me contaron, ese trasvase de datos se tenía que hacer de manera manual, de uno a uno, por lo que optaron por pasarse a LIBER, con el que lo pueden efectuar automáticamente. Sería fantástico poder utilizar el CDU como sistema de catalogación pero de momento nos tenemos que conformar con la numeración que ofrece LIBER.
Al principio la catalogación la efectuaban todos los profesores en su hora de biblioteca, según fueran entrando novedades, pero con los años se ha visto que esto ha hecho flaco favor a la propia catalogación. Ya se sabe que lo que pasa por muchas manos tiende a presentar fallos. El año pasado tuvimos que realizar un inventario exhaustivo porque el número de incidencias era escandaloso. Así que hemos llegado a la conclusión de que solo sea el coordinador el que registre nuevos ejemplares para que haya una estandarización de criterios constante y consistente.
Por último, pienso que la gestión de la biblioteca debiera llevarla alguien a tiempo completo pero de momento cómo están las cosas, es simplemente utópico. De hecho, y aunque me gusta mucho la docencia, me encantaría en algún momento de mi vida dedicarme exclusivamente a la gestión de la biblioteca.
Lo bueno de nuestro centro es que, al ser pequeño, es muy fácil que los profesores podamos aportar ideas y partcipar en proyectos, simplemente con acercarnos al coordinador y proponerle, la comunicación es directa y eso es una ventaja.

No hay comentarios:

Publicar un comentario